Las picaduras de himenópteros conforman una cuestión importante en esta época del año, sobre todo para las personas alérgicas. Normalmente, su tratamiento es sencillo y se pueden atender con rapidez; siempre y cuando se tengan a mano las necesidades médicas básicas para su cura. Sin embargo, no siempre es tan sencillo. La anafilaxia, una reacción alérgica grave y extremadamente peligrosa, puede ponerse en el camino. ¿Qué hacer entonces? Te lo contamos.
Fuente: webconsultas.com

Picaduras en verano: reacciones alérgicas
El primer paso para evitar las reacciones por picaduras de himenópteros: esquivar a los insectos. Aquí tienes una serie de consejos que te facilitan huir de los insectos y evitar sus mordeduras.
Sin embargo, si aun siguiendo nuestras recomendaciones no has logrado evitarlo y sufres una picadura, es necesario que sepas que las reacciones alérgicas se manifiestan a través de los siguientes síntomas:
- Dolor localizado
- Enrojecimiento
- Hinchazón
- Picazón
- Ardor
- Dificultad al respirar
- Opresión en la garganta
Una vez que la reacción ha aparecido y resulta ser normal y no anafilaxia, es el momento de tratarla para evitar que esta empeore:
- Retira el aguijón con cuidado, de hacerlo de forma brusca o con pinzas, puedes apretar la bolsa en la que reside el veneno y hacer que este se disperse más.
- Lavar con agua y jabón la zona afectada afectada
- Cubrir la zona de la picadura con hielo
- Tomar un antihistamínico o aplicar cremas que reduzcan la picazón si lo ha recomendado tu especialista
- Cuidar la picadura durante los próximos días, estar atento a señales de infección
Picaduras en verano: Anafilaxia por picaduras de insectos
La anafilaxia provoca reacciones extremadamente graves que, en su máxima expresión, pueden derivar en la muerte. Por este motivo, en estos casos, nuestra recomendación, que en realidad es una obligación es acudir a urgencias inmediatamente: una necesidad vital. En el caso de España, llama al 112.
Además de tener cuidado con las picaduras de himenópteros, es necesario prevenir y evitar algunas arañas, como la viuda negra o la reclusa parda. Su mordedura puede ser mortal, a diferencia del resto de picaduras de arácnidos, que suelen ser inofensivas.
Nuestro consejo: el de siempre. Visitar al alergólogo y llevar siempre encima toda la documentación sobre tu alergia y el tratamiento necesario. Además, conviene que informes de tu alergia a las personas que te acompañan, de tal manera que, ante una urgencia, puedan ayudarse sin que les pille desprevenidos.