La alergia al kiwi es una reacción adversa del sistema inmunológico a las proteínas presentes en esta fruta.

Fuente: 20 Minutos

Aunque no es tan común como las alergias a otras frutas como las fresas o las nueces, puede ser grave en algunos casos. Los síntomas pueden variar desde leves, como picazón en la boca y erupciones cutáneas, hasta graves, como dificultad para respirar, hinchazón de la garganta y anafilaxia, que es una reacción alérgica potencialmente mortal que requiere atención médica inmediata.

Se pueden experimentar reacciones cruzadas entre el kiwi y otros alimentos, como el látex, las frutas tropicales o los frutos secos. La alergia al kiwi se diagnostica mediante pruebas cutáneas o análisis de sangre para detectar anticuerpos específicos de IgE.

Algunas personas con alergia al kiwi pueden comerlo si se ha cocinado previamente, ya que las altas temperaturas descomponen estas proteínas en su mayoría. En cambio, otros pacientes, deben evitar completamente el kiwi, así como el resto de alimentos que hayan podido estar en contacto con la fruta, o que contengan trazas de la misma. Con la prueba de IgE específica de componentes, se pueden llegar a identificar otros alimentos que puedan llegar a generar reacciones cruzadas.

El tratamiento implica evitar el consumo de kiwi y productos que lo contengan. En casos graves, se pueden recetar medicamentos como antihistamínicos o epinefrina para tratar las reacciones alérgicas agudas. Es importante que las personas con alergia al kiwi estén alerta y eviten situaciones que puedan exponerlas al alérgeno, además de llevar consigo un dispositivo de epinefrina en caso de emergencia.

¿Cómo actuar ante una reacción?

Las personas que sufren asma tienen un mayor riesgo de sufrir una reacción alérgica al comer kiwi. Cuando la primera vez que el kiwi produce alergia en el organismo de alguien supone consecuencias graves, implica que esa persona tenga mayor probabilidad de sufrir otra reacción de gravedad en un futuro.

La mayoría de los pacientes a los que se les ha detectado mediante la prueba de IgE algún tipo de alergia alimentaria se les receta epinefrina, para evitar así reacciones muy graves. Pero, puede suceder una reacción alérgica de manera esporádica. Por ello, es importante estar preparados para responder ante este tipo de situaciones.

Un 85% de los pacientes con asma grave no reciben un tratamiento adecuado.
Mantener los tratamientos de base para el asma es esencial para evitar agudizaciones graves

Si nos encontramos ante una persona que está sufriendo una reacción alérgica y muestra síntomas evidentes, debemos actuar con precaución, pero de inmediato. En primer lugar, debemos llamar al servicio de emergencias. Acto seguido, comprobar el color y la temperatura de su piel, así como identificar si el pulso es débil o acelerado.