En nuestro país, dos estudios describen las frutas frescas, mariscos y frutos secos como las causas más frecuentes en adultos. El aumento de la frecuencia de sensibilización a los pólenes, que se estima en un 15-20% de la población en los países desarrollados, y su relación con la alergia a las frutas y vegetales, sugieren que ésta sea la causa de una prevalencia cada vez mayor de alergia alimentaria en los adultos. En la mayoría de los casos se trata de síntomas leves como el síndrome de alergia oral (SAO), con picor inmediato en labios y boca al contacto con el alimento vegetal crudo pero no debe subestimarse la evolución o la aparición ya inicial de síntomas graves con afectación vital.