Se acaba el verano y ya toca preparar las mochilas para afrontar el nuevo curso. Volver al colegio supone la vuelta a la rutina para los más pequeños, pero no debemos olvidar que sus alergias e intolerancias les acompañarán en su día a día, y por eso siempre debemos estar alerta.

 Antes de salir de casa

Asegúrate de que han tomado su medicación diaria o que la llevan preparada para cuando la necesiten. Además, es muy importante que el niño sea consciente de la importancia de tomar este tipo de medicamentos. Hablar de la enfermedad alérgica con él es de gran ayuda ante situaciones de peligro.

Información a profesores y cuidadores

Lo más recomendable es elaborar un pequeño informe con el tipo de alergias que tiene nuestro hijo, así como de la medicación que está tomando. Esta información debe ser proporcionada a los profesores, a la dirección del centro y al comedor escolar, en el caso de las intolerancias alimenticias.

Cuidado con el ejercicio si sufren de asma

Suele ser habitual que los niños que sufren asma inducida por ejercicio se quejen por tener que hacer actividades físicas. Sin embargo, es muy importante que se mantengan activos, por lo que debe trabajar con el personal escolar para desarrollar estrategias para que su hijo no tenga síntomas mientras hace ejercicio.

Estas pueden incluir:
•    Usar un inhalador de rápida acción 15 minutos antes de hacer ejercicio
•    Beber mucha agua antes, durante y después del ejercicio
•    Elegir deportes que tengan menos probabilidad de desencadenar los síntomas.

Informar sobre la anafilaxia

Ante situaciones de peligro, el personal escolar debe estar formado para saber como actuar ante situaciones límite. Puedes descargarte nuestra guía de anafilaxia para pacientes, con la que puedes aprenderlo todo. ¡Imprímela y pide que la dejen en clase de tus hijos!