La inmunoterapia con alérgenos (ITA) o desensibilización es un tratamiento de enfermedades alérgicas orientado al alivio de los síntomas y a la prevención de la aparición de nuevas enfermedades alérgicas o complicaciones. Es el único tratamiento que ha mostrado modificar el curso natural de la enfermedad.
Fuente: pacientes.seicap.es
La ITA es un tratamiento de larga duración en el que se administra al paciente pequeñas cantidades de la sustancia a la que tiene alergia, aumentándose la cantidad progresivamente hasta alcanzar la dosis óptima que se mantendrá durante todo el tratamiento.
Previamente al inicio del tratamiento con ITA, es imprescindible realizar un estudio alergológico para seleccionar bien al paciente candidato a beneficiarse del tratamiento. También debe seleccionarse el extracto de la ITA que se utiliza, recurriendo para ello a un extracto de calidad que contenga el/los alérgenos causantes de los síntomas del paciente.
¿Cuáles son las indicaciones a tener en cuenta en niños?
La ITA es un tratamiento individualizado pautado por el pediatra alergólogo que se utiliza a partir de los cinco años de edad, aunque no existe contraindicación absoluta para su uso en niños de menor edad, siempre deben ser casos considerados individualmente sopesando beneficios y riesgos.
Para la indicación de tratamiento con ITA se necesita conocer cuál es el alérgeno causante de la sintomatología. También se tendrá en cuenta la intensidad de los síntomas y la necesidad y eficacia de la medicación utilizada para el control de la clínica. Otro de los elementos a valorar por el pediatra alergólogo será la disponibilidad de extractos de calidad elaborados con el alérgeno responsable de las molestias. Se dispone de ITA frente a alérgenos inhalados (ácaros, pólenes, hongos, animales), así como también frente a venenos (avispa y abeja) y también frente a algún alimento (melocotón).
Una vez seleccionado el paciente candidato a la ITA, se deberá seleccionar la forma de administración, pudiendo ser mediante inyecciones por vía subcutánea o mediante gotas o comprimidos sublinguales. Ambas formas han demostrado ser eficaces y seguras. El pediatra alergólogo valorará la mejor vía de administración para cada caso en función de múltiples variables como la disponibilidad de extractos frente al alérgeno responsable, evidencia publicada o preferencia del paciente.
¿Cómo se aplica y cuál es su periodicidad?
La inmunoterapia es un tratamiento de años de duración que se administra en forma de inyecciones subcutáneas o en forma sublingual mediante gotas o comprimidos. La modalidad en inyecciones subcutáneas requiere que la administración se realice en centro sanitario con una frecuencia aproximada de una vez al mes, mientras que las administraciones sublinguales pueden realizarse en el domicilio, pero requieren administración con mayor frecuencia, a diario habitualmente. En el caso de alérgenos estacionales como los pólenes, se puede optar por pautas más cortas como las pre-coestacionales, que se inician antes de la estación polínica y se terminan cuando acaba la misma.
Según la evidencia disponible, el tratamiento con ITA se mantendrá entre tres y cinco años, aunque se realizarán controles periódicos por parte del pediatra alergólogo, quien podrá modificar la pauta o decidir sobre la continuación del tratamiento en función de la evolución del paciente.
Beneficios que aporta la inmunoterapia con alérgenos en niños
Entre los beneficios de la ITA destaca la contribución a la remisión de la enfermedad alérgica al mejorar la tolerancia del alérgeno. Disminuye la sintomatología y mejora la calidad de vida habiendo demostrado ser un tratamiento coste-efectivo. También previene la progresión de rinitis a asma en niños y parece disminuir el desarrollo de nuevas sensibilizaciones.
Los avances en el desarrollo de extractos han permitido mejorar la calidad y seguridad de los mismos. Actualmente las reacciones adversas son cada vez más infrecuentes, siendo muy escasas en las pautas de ITA subcutánea y mínimas en el caso de la ITA sublingual.