Después del verano todos buscan revisar por dentro el cuerpo, una especie de intento de pasarle la ITV tras los excesos del verano. Si son ustedes alérgicos, les voy contando en qué consiste el test
Fuente: elmundo.es
Con la llegada del mes septiembre aparecen las tradicionales visitas para hacerse revisiones de todo tipo, entre ellas las de la alergia.
¿Cómo se detectan las alergias?
Provocándolas, ni más ni menos. La única forma que tenemos de diagnosticar una alergia es provocando que aparezca, algo que conseguimos al poner al paciente en contacto con diferentes sustancias susceptibles de provocar reacciones alérgicas (los alérgenos). Eso sí, de forma controlada y en pequeñas dosis para evitar una reacción anafiláctica grave en caso de que el paciente tuviese una alergia extrema a alguna sustancia.
¿Qué pruebas hay para detectarlas?
Las más usadas son las cutáneas ya que son sencillas, rápidas y muy eficaces. Dentro de ellas podemos encontrar el Prick Test, las pruebas intradérmicas o las pruebas epicutáneas. Contamos también, aunque son menos habituales que las primeras, con las de exposición controlada, las conjuntivales y el estudio de IgE específica en sangre
¿En qué consiste el “prick test’?
Es la más fiable para diagnosticar alergias respiratorias, y nos sirve también para detectar alergias a determinados alimentos o algunos medicamentos. En solo unos minutos, y de forma mínimamente invasiva, podemos detectar reacciones alérgicas hasta a 50
sustancias diferentes al mismo tiempo: varios tipos de pólenes, ácaros del polvo, penicilina, caspa de mascotas… Para ello se deposita a lo largo de la piel del antebrazo una gota de diferentes extractos alergénicos y se realizan pequeña punciones sobre cada gota con una lanceta.
Pasados 20 minutos observaremos el estado del antebrazo y sabremos a qué sustancias se es alérgico.
¿Cuándo se realizan las pruebas intradérmicas?
Cuando queremos confirmar que el paciente es alérgico a una determinada sustancia sobre la que ya tenemos sospechas. Para ello inyectaremos en las capas de la dermis una pequeña cantidad del alérgeno y observaremos si se produce una reacción alérgica loca.
¿Y las epicuutáneas?
Este tipo de pruebas se realiza cuando queremos conocer qué sustancia es la que nos causa alergias de contacto: metales como el níquel, cremas, plásticos…
Para ello adherimos a la piel de la espalda del paciente diferentes parches que contienen alérgenos para luego enviarlo a casa con ellos puestos. Pasadas 48 horas se despegan los parches en la consulta y se observa y anota el estado de la piel; se le envía de nuevo para casa y se repite el proceso a las 96 horas.
¿Hay vacunas?
Se aplican inyecciones de forma periódica y durante varios años a algunos pacientes, con la intención de detener o reducir sus crisis alérgicas.
Duelen estos test
Se considera algo doloroso el Prick Test. El pinchazo con la lanceta es muy superficial. Si son alérgicos a alguna de las sustancias, sentirán un gran picor.